domingo, 6 de febrero de 2011

...Y todo por unas rayas blancas

Siempre pensé que The White Stripes eran una banda facil de admirar pero dificil de amar. Me parecía musica virtuosa pero un poco vacía de sentimiento; no tener bajista me parecía un poco atorrante; el jueguito de ex-esposos-hermanos me parecía más marketing pop que rock.
Ahora que se separaron aparece un gesto que me hace repensar todo:

"... No se debe a diferencias artísticas o falta de motivación para continuar... hay miles de razones, pero sobretodo se trata de preservar lo bello que tiene la banda..."

Un guiño a Jayo Legario, el mejor 8 que dió el futbol peruano en los ultimos 15 años ("hay que dejar el futbol antes que el futbol te deje") y a U2 que después del inmenso y genial Achtung Baby se han dedicado a armar un circo itinerante cada vez más grande y vacío.

"... The White Stripes no pertenecen más a Meg o a Jack, a partir de hoy la banda pertenece a ustedes y pueden hacer con ella lo que quieran. La belleza del arte y la música es que puede durar para siempre si la gente así lo quiere."

Después de este fin abrupto, el mito de White Stripes crecerá ya verán.

No tengo nostalgía porque, como dije, recien los comienzo a amar. Recién ayer me compré el Elephant y reconozcó que fui un soberano huevón todo este tiempo. Queda el consuelo que Jack White seguirá haciendo de las suyas ya sea con The Raconteurs o Dead Weather o con cualquier proyecto que decida armar. Pero no duden que a
l final The White Stripes será la banda que lo va a poner junto a Page y Hendrix. Esperen unos años y verán.

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